Como sea mi querida paisana, solo te pido un favor: sigue a través de tu expresividad y pasión por las letras ese talento inusitado que te descubriste y que todos, absolutamente todos tus grupos de cuenteros admiramos en el fondo y también en la superficie.
Gracias por tener el valor de instaurar un movimiento como este. Gracias por cada uno de los apoyos que nos has dado y nos has brindado y que construyes en un espacio donde se desarrolla la mente. Creo que el destino estaba escrito para que nos conectaremos aquí y no en nuestro extrañado pueblo.