La cualidad de aquello que se puede sostener, que es compatible con los recursos existentes.
Es un sistema de desarrollo que solventa las necesidades presentes, sin afectar las generaciones por venir, sin degradar el entorno en el que habitamos y mejorando la calidad de vida.
Adoptemos la sostenibilidad, sobre todo cuando estamos comprometidos con un proyecto propio que genera bienes y servicios.
Pero, ¿Qué necesitamos?
El paso inicial es… ¡Adivina! Incorporar la mentalidad de diseño.
La mentalidad que potencia la creatividad, aborda lo desconocido y prueba nuevos enfoques.
En la que se desarrolla una visión sistémica.
Porque con el diseño comprendes el contexto, identificas problemas, exploras ideas, generas valor y tienes en cuenta todo el ciclo de vida del producto. TODO. No solo un pedacito.
Y para que sepas, este ciclo comprende:
- El Diseño -seeeh, otra vez-. Resolver problemas y crear valor.
- La Materia Prima. El bien intermedio que permite ser transformado.
- La Producción. El proceso de fabricación.
- Embalaje. El elemento que contiene, asegura e identifica el producto.
- Distribución. La logística de entrega.
- Propuesta valor. La promesa del producto.
- Vida útil. Periodo con condiciones adecuadas de uso.
- Próximo ciclo de vida. Lo que sucede al descartarse.
¿Ves? La sostenibilidad necesita de una visión sistémica, y eso te lo permite el diseño.
Si andas generando productos y quieres que esté presente la sostenibilidad, te podemos ayudar. 👇