Si hay algo que envidio de las universidades del ámbito anglosajón es lo maravillosamente bien que han sabido crear, desarrollar, gestionar y promover el orgullo de pertenencia.
Me encanta comprobar cómo las personas que cursaron estudios en universidades norteamericanas, canadienses o británicas comentan siempre, a la menor ocasión y con satisfacción, cuál fue su alma mater y qué significó para ellos el haber pertenecido a determinada institución y no a otra. Me asombra ver cómo los/las exestudiantes/as llevan las sudaderas con la marca de la universidad con mucha honra años después de haberse graduado.
La comunicación realizada desde las instituciones ha conseguido mucho de este éxito de marca, pero nada se hubiera conseguido sin las asociaciones de alumni, esenciales para el fortalecimiento de ese orgullo a lo largo de los años. Los eventos que organizan, fondos recaudados, publicaciones realizadas… son esenciales para que los egresados mantengan un estrecho vínculo con su universidad.
Es estupendo que se empiece a trabajar más seriamente con los alumni en las universidades españolas, que se fomente el sentimiento de pertenencia, que se ofrezcan razones y motivos para que el alumnado sea realmente embajador, que -por qué no- se disponga de un mejor merchandising y que se creen campañas más allá del #YoSoyDeLaUniversidadX.
¿Está tu institución innovando en este ámbito? Hay tantas oportunidades aquí que tiemblo al pensar en todas ellas.